El estado del líquido de los frenos es uno de los principales motivos por los que se acude al mecánico en España.
Los frenos constituyen uno de los sistemas de seguridad más importantes, por no decir el que más, de nuestro vehículo y es que el principal medio de protección con el que contamos en la carretera, cuando vamos al volante de un coche.
Son muchos los que tienden a olvidar este importantísimo líquido, no obstante las
Revisiones periódicas y las inspecciones técnicas regulares son esenciales si queremos garantizar el correcto funcionamiento de nuestro coche.
En este artículo aclaramos todas las dudas que puedan haberte surgido sobre los fallos en el sistema de frenada de tu automóvil.
Sabrás que los frenos están en mal estado o sufren un problema, ante las siguientes situaciones:
Vibraciones. Si cuando frenas sientes cierto temblor, es hora de pasar por el mecánico.
Ruido. Si al frenar percibes un fuerte ruido puede ser indicativo de que algo va mal.
Si el coche se inclina hacia un lado cuando pisas el freno.
Si el pedal de freno está blando cuando lo pisas.
Si cuesta bajar el pedal del freno.
Si el estado del líquido es bajo.
Utiliza el cambio de marcha y no sobrecargues los frenos. Recuerda que puedes disminuir la velocidad de tu automóvil utilizando la caja de cambios.
Escucha a tu coche. A día de hoy la mayoría de coches cuentan con una alerta en el panel de control que advierte con suficiente antelación de problemas en el sistema de frenado.
No olvides las revisiones. Se recomienda no dejar pasar los 20.000 kilómetros sin revisar el sistema de frenos. Recuerda que en caso de que éstos estén desgastados, la distancia de frenado de tu coche aumentará considerablemente.